El «Síndrome del Intestino Irritable» (SII), es uno de los trastornos funcionales digestivos más prevalentes en el mundo occidental, afectando a entre 6 y 12% de la población europea. Se caracteriza por la presencia de dolor y/o disconfort abdominal asociado a una alteración del ritmo intestinal, con un curso recurrente durante un largo periodo de tiempo.
Dado que la causa y los mecanismos de su aparición no son bien conocidos, existen diferentes tratamientos que se aplican para paliar los síntomas que presentan los pacientes, pero pueden ser de eficacia limitada.
Por ello, a continuación te damos una serie de recomendaciones generales:
- Seguir una alimentación completa y equilibrada.
- Hidratación adecuada, con ingesta de al menos 1,5-2 litros de agua diarios (6-8 vasos).
- Fraccionar la alimentación en mínimo 5 comidas al día (desayuno, media mañana, comida, merienda y cena). El menor volumen mejora la tolerancia y se evitan comidas copiosas que son más pesadas para su digestión.
- Ser regular con los horarios de las comidas.
- Evitar cenar muy tarde e intentar que pase preferiblemente 2 horas antes de acostarse.
- No comer con prisas ni estrés. La masticación es la primera parte de la digestión de los alimentos, y su realización no adecuada conlleva “engullir” los alimentos con ingesta de gran cantidad de aire junto con la comida, que potenciará la sensación de hinchazón y malestar, y una digestión posterior más lenta en cuanto el alimento no ha sido preparado adecuadamente para su paso posterior al estómago. En la saliva existen enzimas como la amilasa que comienza ya la digestión de ciertos principios activos si formamos adecuadamente el bolo alimentario.
- Mantener una posición correcta (sentado en una silla con la espalda recta) a la hora de comer.
- La manera en cómo se ingiere un alimento así como la técnica de preparación culinaria pueden afectar a su tolerancia o percepción de cómo le sienta el alimento. Se recomienda evitar temperaturas extremas así como evitar guisos fuertes o frituras. Las cocciones tipo hervido, vapor, a la plancha… son en general mejor toleradas.